Hemos perdido más que los lobos
(fieras aún no domésticas)
el arco continuo y las columnas
la esfera de las probabilidades
desciende por un precipicio
imaginado por los astrólogos
uno y otro cuerpo cayendo
en la invención de la línea
su conexión inequívoca
con el mutismo y la redondez.
Desde siempre, desde el caos
hasta el fin, nace el designio,
del rostro surge la melancolía
de la carne la pena
perverso tiempo / hojarasca que no fue
intensa sonoridad del país
su peso en la teoría de tres mujeres.