Hotel

Este hotel

huele a fantasmas

este hotel

respira azufre y puñales,

sombras deshilachadas

cuelgan de sus paredes,

una coreografía de cicatrices

avanza por sus pasillos.

No son mis quejidos

peregrinando estas sábanas,

no son tus nalgas acechando

estos espejos.

Este cuarto está cargado

amorcito mío,

vístete y busquemos otro sitio,

acá atisban otras pupilas,

en este hotel no pasa,

alguien nos ganó la mano

cosita mía.

Este hotel

está teñido

de un luto aún inconcluso.