(2017)
I
En el centro del corazón
el lenguaje es sagrado.
Solo palpita mi ser
atolondrado por ti,
por la clorofila de tus intersticios
acantilables.
Solo tú
mi españopudunguna
del alma.
IX
Los volcanes
esperaron siglos
para verse
en tus ojos.
XIX
Sube a latir conmigo, amor.
Sube a latir
desde el magma infinito.
Acá estoy yo,
encandilado,
como una flor
que espera
ser voz,
ser fuego,
y desplegar
su canto
entre tus pliegues.
La hermosura de tus manos es
la dimensión del universo.